domingo, 27 de octubre de 2013

¿Por qué Jaén es tierra de Jesús Nazareno?


¿Por qué Andalucía, y de forma más específica Jaén, siente una devoción tan profunda a Jesús Nazareno? La respuesta es contundente. Debido a los frailes carmelitas descalzos. Y de forma particular, se debe a San Juan de la Cruz.
El Padre Juan Dobado Fernández OCD, afirma con rotundidad que el encuentro que San Juan de la Cruz tiene con una pintura de Jesús Nazareno en el Convento de Segovia es el origen de la propagación de la devoción a Jesús Nazareno en gran parte de la geografía andaluza.


Imagen encargada por el Santo. Granada.

Jesús Nazareno del Paso. Baeza.
El Santo profesó gran veneración por la imagen de Jesús con la cruz a cuestas. Siendo prior en Granada, establece la Cofradía de Jesús Nazareno en 1582, a la que redacta sus primeras reglas, y es él mismo quien encarga la Imagen, al escultor Pablo de Rojas, naciendo así la devoción al Nazareno en Granada. Ya antes había establecido en el Convento de Baeza la Cofradía de Jesús Nazareno, dándole también unos sencillos estatutos, susbsistiendo esta Cofradía en la actualidad .

Cuadro que habló al Santo
San Juan marcha en 1588 a Segovia como Prior, y sigue promoviendo la devoción al Nazareno. Y allí sucede algo excepcional. Un día cualquiera da con un cuadro abandonado que muestra a Jesús cargado con la cruz. Decide darle mayor dignidad, lo arregla, prepara un altar, lo decora con flores y cera y será su lugar de oración a partir de ese momento. Estando un día delante, Fray Juan escucha unas palabras: “Fray Juan, pídeme lo que quisieres por estos trabajos que me has hecho”. A lo que el Santo Respondió: “Señor, padecer y ser despreciado”.

Este hecho es el espaldarazo necesario a la expansión de la devoción de este pasaje. Este hecho que todos dan por milagroso, comenzó a difundirse en los grabados de sus obras escritas, y a popularizarse entre los conventos. No queda pues Convento carmelita que no quiera contar con una imagen de Jesús Nazareno. Y muchas hermandades se fundan aún mientras vive el Santo, así la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Jaén, el popular Abuelo, hacia 1588. Pocos meses después la de Mancha Real y la de Alcaudete. A tal punto llegó este auge que allá donde los frailes carmelitas fundaban un convento, inmediatamente surgía en su seno una cofradía para venerar a Jesús Nazareno.

Las cofradías procesionan de una forma peculiar, evitando el ejercicio de la disciplina o flagelación que practicaban los cofrades de la mayor parte de las hermandades penitenciales, cargan en cambio los hermanos con una cruz para imitar a Cristo por la calle de la Amargura.

Como podemos ver, la arraigada devoción que Andalucía, y concretamente Jaén siente por Jesús Nazareno, es fruto de la mística de nuestro insigne doctor, en una provincia de clara raigambre y honda espiritualidad
carmelitana.